Buen verano… y sin perder de vista el cielo
Con la llegada de las vacaciones estivales este blog entra en hibernación. El objetivo de esta sección, salvo excepciones, es el comentario de las noticias leídas y enviadas por los alumnos. Por tanto no será hasta septiembre cuando se reinicie la actividad en este rincón de la web. No obstante, queremos despedirnos dejando el foco de atención sobre algunos eventos que, sin duda, tendrán interés y protagonismo a lo largo del verano.
Ahora mismo el módulo de descenso Philae está activo y comunicado, aunque intermitentemente, con la sonda Rosetta. Cuando hace 8 meses el pequeño módulo agotó sus baterías y perdió cualquier capacidad de comunicación, muchos cuestionaron los costes de este tipo de proyectos. Aunque no hubiera vuelto a emitir ni un solo bit de información hay que recordar que la misión había sido calificada por todos los organismos implicados como un completo éxito.
Los datos que fueron recogidos hasta noviembre son, en gran medida, únicos en la observación de cometas. Además del interés científico, el propio reto tecnológico tiene una importancia descomunal de cara a afrontar proyectos similares con otros cometas o con asteroides. No repetiré las comparaciones que en esta página y en muchas otras se hicieron sobre el grado de precisión que supone el haber “encestado” sobre un blanco de ese tamaño y a esa velocidad. En cualquier caso, y como prudentemente apuntaron los responsables de la misión, había una esperanza razonable de que con la aproximación al perihelio (punto de la órbita más cercano al sol) las baterías pudieran recargarse de nuevo y transmitir información útil.
Ahora la cuestión radica en conseguir obtener comunicaciones más largas y regulares para poder hacer experimentos de nuevo. Una solución puede consistir en aproximar la órbita de Rosetta al cometa. Con toda seguridad volveremos a tener datos sorprendentes que nos harán progresar en nuestra capacidad de afrontar nuevos retos. Quizá seamos la única especie capaz de influir en su propio destino y eso solo se conseguirá avanzando en el conocimiento de la naturaleza. Algunas de las observaciones actuales de la sonda las podéis leer por aquí:
http://www.abc.es/ciencia/20150702/abci-cometa-agujeros-esfericos-201507021331.html
Cometa P67 visto desde Rosetta/Fotografía de ESA
Pero quizá el plato fuerte del verano científico sea la llegada de la sonda New Horizons hasta el sistema de Plutón y sus lunas. Para los que crecimos con un sistema solar de nueve planetas, Plutón representaba lo más misterioso, alejado e inhóspito que nuestra mente podía concebir. A pesar de que podemos encontrar infiernos despiadados mucho más cerca (como nuestro poético e inocente vecino Venus) los niños de mi generación pensábamos que desterrar a un ser humano a Plutón superaba con creces cualquier tormento bíblico (que de esos también estudiábamos). Con el paso de los años quedó degradado a planeta enano o planetoide pero eso no restó ningún interés a este cuerpo celeste.
Es posible que buena parte de la sociedad no acierte a ver la trascendencia de este momento, pero estamos a punto de conquistar el último rincón del sistema solar. Desde que en 1989 la Voyager 2 se aproximase a Neptuno no hemos vuelto a presenciar la llegada de un artefacto fabricado por el hombre a un planeta inexplorado. Por encima de la componente épica del evento, el interés científico de la misión es máximo. Plutón divide, en cierto modo, esas dos zonas tan misteriosas como importantes que son el cinturón de Kuiper y la nube Oort.
Estamos examinando los últimos rincones del imperio del Sol y si algún día nuestro camino prosigue en otra estrella será porque hayamos comprendido en profundidad lo que sucede en la nuestra. Nueve años han sido necesarios para que el próximo 14 de Julio la sonda llegue a unos 12000Km de Plutón (poco menos de un diámetro terrestre). Desde allí y con un retraso de unas 5 horas empezaremos a tener imágenes reales de Plutón. Casi nada! Hay que recordar que hasta ahora todas las imágenes de Plutón de los libros de texto son recreaciones artísticas o fotografías realizadas desde distancias millonarias en kilómetros. El evento es, sin duda, histórico. Por aquí su página oficial:
Y para abrir boca, esta imagen histórica de los dos hemisferios de Plutón. Evidentemente, todas y cada una de las imágenes que van llegando son históricas porque cada una supera a la anterior y son completamente inéditas. Todo un espectáculo.
Los dos hemisferios de Plutón y su luna Caronte / Fotografía de la NASA
Y como todos los veranos, llegarán las Perseidas. Pero este año tienen el aliciente de que se producen en luna nueva y por tanto las posibilidades de observación mejoran notablemente. Es posible que no alcancemos a ver la frecuencia de destellos que nos informan, ya que hay muchos factores que intervienen en una buena observación. Pero con toda seguridad, a una gran mayoría les servirá para maravillarse con la contemplación del cielo nocturno y puede que sea la causa de que comiencen a interesarse (sobre todo los jóvenes) por la observación astronómica.
Nosotros por nuestra parte seguiremos trabajando en la sección de vídeos y subiremos alguno más en las próximas semanas.
Hasta la vuelta, buen verano a todos.